Cambiando el rumbo: abril 2012

De vez en cuando uno se pone a discutir con estos personajes, porque mal o bien, uno tiene que leer bastante para refutarlos en sus "teorías revolucionarias". Es un buen "ejercicio intelectual". Pero uno que camina los pasillos de la UBA a veces ya se cansa de este izquierdismo infantil. Y como no soy quien para criticar a los compañeros les dejo un buen link de Razón y Revolución un grupo de intelectuales de la facultad que se cree la vanguardia intelectual, el faro que iluminara las almas nobles proletarias. Para que usted noble lector, saque sus propias conclusiones. Sobre todo si sos estudiante de la UBA, y te creíste todas las mentiras, de que estas agrupaciones o partidos, que están en contra de la "burocracia", de la rosca política, que deciden todo en "asambleas", que son almas nobles que no les importa el dinero, y muchos mas eslogan (si lo escribo así eslogan!) que repiten hasta el cansancio (en una clara lógica de "auto convencimiento")

Aca les dejo para que ustedes se deleiten (es esto o ver el programa de Jorge Rial)

Estamos en presencia de una de las grandes fases de crisis en la cual a entrado el sistema capitalista mundial en los últimos tiempos. Los países del primer mundo están inmersos, producto del mismo sistema explotador, en una crisis económica financiera sin precedentes. Siguiendo sus recetas de economía ortodoxa no logran encontrar una salida a semejante debacle. Es cuando, por su lógica imperial, recrudecen los mecanismos de expoliación hacia los países periféricos (o del “tercer mundo”) sin perder demasiado “cuidado” en sus practicas. Por un lado continúan con su política de penetración cultural dispuesta a destruir nuestra conciencia nacional. De esta forma, como afirmaba Abelardo Ramos, es que seguimos combatiendo al sistema cultural que reposa en el dilema sarmientino de “civilización o barbarie”, que según cabe imaginar sitúa la barbarie en América y la civilización en Europa. Es por eso que continuamos debatiendo con aquellos sectores que pretenden calificar al 2 de abril como “una aventura irresponsable”, no poder entender esa heroica lucha contra el imperialismo, solo porque procedía de un gobierno de facto y de Fuerzas Armadas que no merecían confianza. Más aun, aquellos intelectuales que defienden a capa y espada la posición británica de dejar en los “kelpers” la decisión de su futuro, justificándose en la tesis de la autodeterminación de los pueblos. Quizás lo que estos intelectuales no comprendan es que “ese pueblo” es una población implantada tras una usurpación militar que significó la expulsión de los ciudadanos argentinos que entonces habitaban las islas. No es extraño para nosotros que estos sectores defiendan las posiciones de los países centrales. Estudiando la historia de nuestro país se puede comprobar en que posición se encontraban cuando la dicotomía imperialismo nacionalismo saltaba a la luz de forma evidente. Como no van a resonar las palabras de Hernández Arregui que decía “estos intelectuales democráticos, a veces a pesar de ellos, sin conciencia de su verdadera situación al ligarse a la oligarquía, representan a la pequeño burguesía pro imperialista, el carácter uniformemente extranjerizante de sus escritos, refleja la naturaleza portuaria de esa mentalidad parasitaria del comercio de exportación”.Por otro lado, Inglaterra “ataca” de forma directa a la Argentina, en una escalada verbal, llegando al limite del absurdo tratando a la Argentina de “colonialista”. Se muestra como el defensor de esa pequeña e inocente población que esta siendo atacada por un gobierno “populista” (y otra vez tenemos el dilema sarmientito) No tiene reparo, en militarizar la zona del Atlántico Sur, ni siquiera de mostrar un gesto diplomático y envía al Príncipe a realizar ejercicios bélicos a nuestras Islas.

Vivimos un momento histórico único, en el cual los países de America del Sur y del Caribe, intentan, pese a sus diferencias, mostrarse como un bloque cada vez más sólido. Nuestros bloques regionales, UNASUR, ALBA y MERCOSUR , muestran una integración estratégica en materia militar y financiera, reafirmando su independencia de la tensión que busca el imperialismo. Malvinas debe ser un motor de empuje de reivindicaciones históricas, y agrupar tras de si un posicionamiento regional en contra de las filas imperialistas y de esta manera poder desplegar una política latinoamericana que tienda a la liberación de los pueblos sojuzgados. Este debe ser unos de los principales motivos por lo cual, la reivindicación de las Islas Malvinas, no debe ser solo a nivel nacional sino a nivel regional y global, colocándose definitivamente como uno de los capítulos más insignes de la liberación latinoamericana y mundial. Nuestra Presidenta lo ha plasmado el siete de febrero pasado en su discurso sobre el Informe Rattenbach “..es también regional y global porque las grandes batallas del siglo XXI van a ser sobre los recursos naturales de nuestros pueblos. Y América latina, la América del Sur es una de las regiones más ricas del planeta, no solamente en recursos humanos, sino en recursos naturales, en agua y en todas las potencialidades que a diario se están descubriendo…finalmente, y tal vez aquí lo más importante, es también una causa regional y global porque están militarizando el Atlántico Sur una vez más. No podemos interpretar de ninguna otra manera, a pesar del mayor esfuerzo y voluntad que pongamos, el envío de un destructor -esa sola palabra-, un inmenso y modernísimo destructor acompañando al heredero real, a quien nos hubiera gustado verlo con ropas civiles y no con uniforme militar. Creeríamos, entonces sí, que otras son las actitudes.

Es el momento a nivel regional de terminar de desenmascarar los intereses británicos, pero también ayudar a remarcar la contradicción fundamental entre países centrales y países periféricos. No podemos negar la política de desmalvizacion que intentaron llevar a cabo en diferentes momentos de nuestra historia, y sobre todo, luego de la derrota militar en el conflicto de 1982. Como defensores de la política como instrumento de cambio, creemos que esta situación no tendrá resolución por la vía militar. La diplomacia es un factor importantísimo, pero es la resolución política estratégica regional la que dará paso al firme reclamo de nuestra soberanía.

Malvinas es el claro ejemplo de la política imperialista de los países centrales. Remarcar esa contradicción en su accionar, es también desenmascar la dicotomía de centro-periferia, pero no solo a nivel de un falso nacionalismo, sino de demostrar la política llevada a cabo por esos países hacia la región tomándolos como simple proveedores de materia prima. Reclamar Malvinas, es reclamar los recursos estratégicos. Es discutir a nivel mundial las reservas petrolíferas, mineras, de recursos naturales. En este contexto es la Argentina la que hoy, debe ponerse a la cabeza de esos reclamos en la región. Esto demanda una gran responsabilidad. Pero creemos que el pueblo argentino esta a la altura de las circunstancias. Es él, el que debe defender las herramientas políticas y legales que existen (ley 26.659/2010, resoluciones de la ONU, entre otros) y demandar y promover acciones en consecuencia.La política de bloqueo a buques con bandera “Falklands” que vienen realizando los países de America del Sur es una acción de suma importancia. Es la línea de Moreno, de San Martín, de Bolívar, es la reivindicación de la Vuelta de Obligado. Ojala sea el puntapié inicial de una política antiimperialista en conjunto. El sueño de la Patria Grande.

No podemos terminar un análisis de Malvinas, sin dejar de nombrar aquellos patriotas argentinos que combatieron en defensa de nuestra soberanía. Desde esta líneas el mas merecido homenaje.

“EL talón de Aquiles del imperialismo son sus intereses. Donde esos intereses del imperialismo se llamen “petroleo” basta para vencerlos, echar una piedra en cada pozo. Donde se llame cobre o estaño basta con que se rompan las maquinas que los extraen de la tierra o que se crucen de brazo los trabajadores explotados.”

Evita